1. No Ordinary Family:
ABC Family siempre se ha caracterizado por ser una cadena que hace más o menos honor a su nombre, pese a que en muchas cosas intenta hacer la competencia, claramente, a The CW, poniéndose teen. Series como Greek, Make It or Break It, The Secret Life of the American Teenager, Pretty Little Liars, Huge, 10 Things I Hate About You, Kyle XY o la tristemente desaparecida The Middleman, son las series originales que hablan de la cadena más que cualquier palabra. En el caso que nos ocupa, la serie sí intenta ser bastante más familiar que teen, pero me da la sensación, terrible, de que no tiene problemas para decidirse por un género y un tono: comedia, drama familiar, ciencia ficción... tiene un poco de todo y no hace nada especialmente bien, aunque los efectos especiales no cantan y son bastante naturales. A mí me recuerda mucho en ciertas cosas a Kyle XY, pero menos adolescente. La presencia de Michael Chiklis (The Shield) y Julie Benz (Dexter) es, básicamente, lo que sostiene el episodio, pese a que no tiene grandes defectos, simplemente, no entusiasma demasiado y falla a la hora de poner buen cebo al anzuelo para que piquemos y vayamos a por más, dejando la sensación de que sus dos protagonistas adultos están desaprovechados (el resto del casting es bastante olvidable).


2. Rizzoli & Isles:
Su tono y estilo me ha recordado a la anterior serie de una de sus protagonistas, Angie Harmon, Women's Murder Club, una serie que le gustaba mucho a mi madre y que cancelaron sin cerrar sus líneas argumentales. Además, mezclamos ésta con algunas de las series procedimentales de parejas (Bones, Castle...), y tenemos la serie que nos ocupa. Éso sí, como es de la TNT, se permite ser un poco más dura en el crimen que nos cuenta, pese a que su resolución no es que sea lo más interesante o importante del episodio. Las dos protagonistas, por ahora me han dejado una sensación de importancia desigual, pero me imagino que la cosa irá evolucionando: Isles tiene mucho menos peso en el episodio que Rizzoli, mucho menos. Éso sí, aunque uno en seguida podría pensar que Isles es Brennan, pero creo que es (o será) un personaje menos exagerado, más realista y matizado. Brennan es genial, pero no es realista. No es que lo quisiera de otro modo, pero es así. Rizzoli es un personaje más típico, pero por éso el primer episodio está dedicado a ella y a sus miedos, para darle profundidad. Si os gustan las procedimentales de parejas, esta vez con dos mujeres de protagonistas, lo cual no es habitual (aunque ya he citado la serie anterior de una de las protagonistas y, allí, las mujeres eran protagonistas de un procedimental) y es algo que puede interesar por igual a hombres y mujeres.


3. The Big C:
¿El cáncer está de moda? Bueno, no sé. Por experiencia personal sé que la gente real no se enfrenta a la enfermedad ni como en la serie que nos ocupa ni como en Breaking Bad, pero es que entonces las series no tendrían gracia. A parte, sus protagonistas no son normales: tienen problemas serios internos, problemas que les han llevado a reprimirse o a no experimentar una parte de ellos durante toda su vida. En el caso que nos ocupa, Cathy (interpretada creo que muy bien por Laura Linney), una profesora, siempre ha sido una persona aburrida, conformista, conservadora y, ahora, tiene un melanoma y no quiere tratarse porque le gusta su pelo, lo que va a hacer es dejarse llevar y hacer cosas que no ha hecho nunca. La serie no tiene nada que ver con BB, nada: es una comedia vitalista con toques de drama y humor negro, muy al estilo de las producciones de la cadena de la CBS Corporation, Showtime. En cuanto al resultado, me ha resultado entretenida, muy lanzada y ágil, desde luego el mejor de los tres pilotos. Obviamente, al igual que en los casos anteriores, todo depende mucho de vuestros gustos. Ya que, pese a todo, es fundamentalmente optimista (no en cuanto a la enfermedad, sino en cuanto a la actitud que viene después una vez elegido ése camino), yo veré un par de capítulos más a ver si me engancha, aunque no tiene mucha pinta de fascinar.