- (500) Days of Summer - 2009 - 4,5/5
Dirección: Marc Webb.
Guión: Scott Neustadter y Michael H. Weber.

Atípica, "comedia romántica", si se le puede llamar así, que en algunos conceptos me recordó bastante a Eternal Sunshine of the Spotless Mind, otra película que me encantó, aunque en una vertiente más realista, por decirlo de algún modo. Y es que, esta película sobre el amor, que no una historia de amor, como advierte al inicio la película (a parte de advertir, de manera genial, en qué puede o no estar basada la trama), me ha parecido genial. No la vean buscando lo típico, porque se quedarán bastante desilusionados, no con la calidad, sino literalmente, ya que la historia tiene cosas algo amargas. En parte, uno de los grandes méritos de la película es que consigue de manera estupenda que conectemos con el protagonista, Tom [Joseph Gordon-Levitt... al cual, nada más verle, mi novia reconoció como uno de los protagonistas de 3rd Rock from the Sun o, como aquí la conocíamos, Cosas de marcianos... casi nada la traducción, cosa que también se aplica al título de la película que nos ocupa, que fue traducida como 500 días juntos, lo cual hace que pierda su significado, pero bueno], que nos pongamos de su lado, como si fuera nuestro amigo o nosotros mismos. Un buen trabajo ahí.

El desarrollo de la historia, da saltos temporales muy inteligentes adelante y atrás en el tiempo y tiene muy buenos personajes, desde los protagonistas hasta los amigos de Tom y, claro, su hermana pequeña, que me encanta. ¿Hay comedia? Sí. ¿Hay romanticismo? Sí. Pero ni una ni otra están en los lugares habituales y la mezcla de esos elementos con el drama se hace de forma que lo que queda al final no sino un mosaico de lo que es la vida, más que un pastiche de varios géneros.
Sin contar nada más, creo que no se me ocurre cómo venderos la película, pero, si alguna vez os habéis fiado de mí, creo que os gustará el pequeño viaje que plantea la película, pequeña en presupuesto, seguro, pero muy grande de alma, amarga, ácida y dulce a partes iguales. Ya me diréis.