Sí, ya, jo, ya lo sé... pero era la más corta, de sólo 10 episodios (¿coincidió con la huelga?)... Que no, que no hay excusa. Eso sí, intentaré racionar la última temporada adecuadamente... ¡ay!, si ya he visto el primero, ups (el final de la sexta y el principio de la séptima parecen hechos como episodios de la misma). En fin, a estas alturas, ya sabéis qué opino sobre la serie y qué efecto tiene sobre mí: no puedo dejar de verla (y, no se asusten: cuando escribí el post sobre la quinta, ya había visto casi la mitad de ésta pese a mis intentos).


Esta temporada ha alcanzado un punto final en que todo está tan liado y tan jodido, que lo más normal es que terminaran la serie, seguro. Todos contra todos. Y el espectador se beneficia de ello, con sorpresas, traiciones, secretos, mentiras, asesinatos, mafias, bandas de todos los colores... y en medio de todo ello, acción, investigación policial y nuestros protagonistas que nunca volverán a ser los mismos, nunca. Han pasado por demasiado. Y nosotros con ellos. Ésa es una de las claves, a mi parecer, de la serie: hemos pasado por tanto juntos que sólo queremos ver y ver más para saber cómo termina todo.

Espero, sin duda, una temporada final apoteósica pero, en el fondo, no espero más que lo que he recibido hasta ahora, una serie policial que se revuelca en el fango y va a los lugares más oscuros y tenebrosos, allí donde otras no se atreverían. Y éso lo hace gracias a que sus personajes sí se atreven y ha llegado un momento en que nada, pero NADA, nos extrañaría que ocurriera y, aún así, no se les ve venir siempre. Principales y secundarios, todos, navegan por mares que no siempre les gustaría haber surcado.


Lo intentaré, pero si dentro de 7 u 8 días tenéis por aquí un extenso post dedicado a la serie y su final, madre mía, sólo sabré empezar diciendo lo de siempre: no me puedo resistir.

The Shield, Temporada 5.
The Shield, Temporadas 3 y 4.
The Shield, Temporada 2.
The Shield, Temporada 1.