Ah, el Buscaminas (Minesweeper) de Windows. Quién puede decir que no se ha perdido buscando, que no ha consumido tiempos preciosos frente a una pantalla entretenido, o hipnotizado, por este simple pasatiempo. Tan simple y, a la vez, ya uno de los símbolos más claros de la era digital (aunque aquí hasta salga números que no son unos y ceros), pues su mecánica es complicada, que no imposible, de replicar con eficacia por medios tradicionales.


Últimamente le he cogido cariño (forzoso) a él y su panda de entrañables macarras. Se hacen llamar “los juegos del Windows” y son no sólo unos macarras sino, principalmente, unos sádicos que siempre están ahí pero a los que sólo ves en momentos de desesperación e incomunicación. Bueno, tampoco es eso, digamos que son como los buenos amigos: siempre están ahí cuando los necesitas (a no ser que seas de ésos que ha preferido no cultivar ese tipo de amistades… y no los ha instalado, algo posible pero que no concibo sólo por respeto) pero no piden nada a cambio ni molestan cuando estás en otras cosas, permanecen agazapados, viviendo su vida (una que, en este caso, no puedo concebir sino como una vida triste y aburrida) hasta que se les llama:
- Oye, Minas, tronco, pásate por mi choza que el tema está mu paradito. No tengo interné y la tv no funciona.
- Vamos, que lleve algo de droja, ¿no?
- Ahí le has dao.


Esa banda, para mí, siempre estará formada por los mismos, pese a las nuevas adquisiciones y novatos varios: el Buscaminas, el Solitario, el Pinball y el Spider (a el Corazones nunca le entendí y él siempre rechazó ayudarme)… No me digan que no parecen los miembros de alguna banda.
Pero bueno, sean los que sean, el Buscaminas siempre será un poco más especial para mí, aunque sólo sea por el hecho comentado anteriormente: su réplica en el Mundo Real™, no es inmediata y me parece más unido que el resto de forma intrínseca al sistema operativo de Bill Gates (no es algo especialmente original, al igual que el sistema operativo, pero funciona y es sencillo, como… bueno, tampoco nos pasemos).